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COMUNICADO

Ante las reiteradas informaciones inexactas y opiniones construidas sobre ellas, que han sido difundidas por algunos medios de comunicación respecto a la actuación de la Organización de Estados Iberoamericanos – OEI en procesos de selección vinculados a obras públicas, es necesario precisar lo siguiente:

1) A la OEI no le corresponde ninguna de las siguientes tareas: elaborar los expedientes técnicos y las especificaciones técnicas, definir los términos de referencia, determinar los valores referenciales, monitorear el cumplimiento de los contratos ni aplicar penalidades por incumplimiento, si fuera el caso.

2) La OEI no ejecuta obras ni actualmente asume compromisos de supervisión de obras, lo que hace, autorizada por la legislación vigente, es desarrollar, en actos públicos y transparentes, los procesos de selección que los organismos públicos le requieren. Se atiene, para ello, a los principios establecidos en la legislación de contrataciones y adquisiciones estatales, así como a los expedientes técnicos, las especificaciones técnicas y valores de referencia que las instituciones públicas determinan.

3) La OEI exige en las Bases de los procesos de selección que convoca el sometimiento del contrato a la normativa de contrataciones y adquisiciones del Estado Peruano.

4) Toda la documentación de cada proceso es luego remitida a la entidad para archivo y control de parte del Sistema Nacional de Control. No es cierto, por tanto, que las licitaciones que la OEI desarrolla se sustraigan del control.

5) En los casos en que la OEI administra los recursos que le son encargados, nuestro organismo no desembolsa monto alguno sin que antes medie una comunicación oficial expresa de conformidad y autorización previa de parte de la entidad correspondiente.

6) La OEI no ha participado en muchas de las licitaciones de obras que se le atribuyen (hospitales de la Región Moquegua, hospitales de ESSALUD, Hospital del Niño, etc.).

7) En virtud de un convenio con el Ministerio de Salud, éste encargó a la OEI la licitación pública para la construcción de dos hospitales: el de San Juan de Dios de Pisco y el de Santa María del Socorro de Ica. Pese a que las convocatorias fueron publicadas en dos medios periodísticos, en la primera licitación se presentó un solo postor en forma de Consorcio siendo adjudicado con la buena pro; en la segunda licitación se presentó nuevamente un solo postor, uno de los conformantes del consorcio anterior, siendo el resultado del proceso la declaratoria de desierto. Las empresas que, según los medios estarían cuestionadas, ni siquiera compraron bases en ninguno de los dos procesos.

8) Hemos dicho, y lo reiteramos, que mantuvimos contactos con el Sr. Rómulo León como una forma más de acercamiento para acceder a la posibilidad de firmar un Convenio Marco con el Ministerio de Salud e informarle de algunos términos y condiciones de nuestro trabajo. No hubo ilícito en ello. De estos contactos, analizados objetivamente, no se puede deducir que estuviesen encaminados a cometer actos ilícitos ni que alguien tenga dominio alguno sobre las decisiones de la OEI pese a las afirmaciones de terceros.

9) Finalmente, reiteramos que la OEI actúa con transparencia e imparcialidad, como les consta a las instituciones públicas que confían en su trabajo. Invocamos, pues, a los diversos medios de comunicación, sin perjuicio de mantenerse vigilantes, a ser objetivos en las informaciones y responsables en las apreciaciones que emiten respecto a la OEI. Como organización seria cuidamos nuestro buen nombre e invocamos a que se informe con responsabilidad e imparcialidad, en procura que todos veamos respetados nuestros derechos en el ejercicio de las libertades que ejercen los medios de comunicación y que contribuyen a la información de la población y al control ciudadano.